Los lentes de contacto anuales están diseñados para usarse durante un año completo antes de ser reemplazados. Son una opción popular para quienes buscan una solución de corrección visual de largo plazo con menos frecuencia de sustitución. Estos lentes requieren un mantenimiento más riguroso en comparación con los lentes descartables, algunas de sus características son:
Durabilidad: están fabricados con materiales que permiten un uso prolongado, ofreciendo una corrección visual efectiva durante todo el año.
Mantenimiento: requieren una rutina de limpieza y desinfección diaria para evitar la proliferación de proteínas y acumulación de depósitos, reduciendo el riesgo de infecciones. Es necesario almacenarlos en una solución adecuada cada noche y cambiar el estuche una vez al mes.
Rangos de medidas: muchas marcas ofrecen rangos elevados para aquellos pacientes con medidas muy elevadas, en algunos casos pueden llegar a pasar miopías de -20.00 D.
Costo: aunque la inversión inicial puede ser menor en comparación con los lentes descartables, el costo por uso a lo largo del año puede ser igual o mayor debido a la rigurosidad de su mantenimiento.